viernes, 14 de octubre de 2016

'CASO RAÚL FERNÁNDEZ'

La Fiscalía pide un año de prisión por la paliza al joven isleño pero no observa delito de odio 


La acusación particular eleva la petición de pena hasta las cinco años por lesiones con uso de "medios y métodos peligrosos"


Por José García



El Ministerio Público ha pedido un año de prisión para J.D.R. como presunto autor de un delito de lesiones por la paliza propinada a Raúl Fernández en la madrugada del 25 de diciembre de 2013 en un pub de la calle San Cristóbal, en San Fernando, según el escrito de acusación al que ha tenido acceso este blog.

    La Fiscalía acusa a J.D.R. de golpear  "varias veces con el puño y después con patadas" a Raúl Fernández "por un contacto físico involuntario", así como de golpear igualmente a Francisco Javier Bonet, que intentó interponerse entre el agresor y la víctima, y por lo que se imputa al acusado otra falta de lesiones.

   En todo caso, el Ministerio Fiscal obvia cualquier referencia al contenido y la motivación homófoba de la agresión y elude así imputar delito de odio alguno al acusado, circunscribiendo los hechos al delito de lesiones con resultado de "policontusiones y herida inciso contusa en el labio superior que requirió puntos de sutura quirúrgica, además de agravación de la patología psiquiátrica previa".

   Por su parte, la acusación particular tampoco se plantea, en principio, la concurrencia del delito de lesiones con el delito de odio, aunque sí refiere en su escrito de acusación que  J.D.R. "por un contacto físico involuntario, creyó por la condición sexual de la víctima que estaba insinuándose y dada la aversión que tiene hacia las personas de las tendencia sexual de la víctima [...], utilizando sus conocimientos y técnicas de artes marciales", propinó la brutal paliza que aguó la fiesta a Raúl.

    La acusación particular ha preferido establecer la concurrencia del delito de lesiones con el de "uso de medios y métodos peligrosos" para la vida de la víctima para poder elevar la petición de la pena privativa de libertad hasta los cinco años, además de la cuantía de la indemnización por daños y perjuicios.

   Subsidiariamente, y en caso de no contemplarse el agravante de "uso de medios y métodos peligrosos", la acusación particular solicita la consideración de otra circunstancia modificativa del mero delito de lesiones, como es el  "abuso de autoridad", en cuyo caso la petición de la pena de prisión quedaría reducida a tres años.

    A la vista oral están llamados a declarar siete testigos, además de la propia víctima, y se aportarán para la acusación diferentes pruebas periciales.


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